Recientemente he podido asistir a la representación de un espectáculo llamado: "Lärdom", del grupo ECOTONO, bajo el paraguas de Baraka Project. Un amigo y compañero teatral actuaba en ella y ,como no podía ser menos, me pasé a brindarle mi apoyo.
Se trata de DANZA-TEATRO, en esta ocasión representada en una plaza pública. Entre cañitas y tapas, tres bailarines-actores y una bailarina-actriz estrenaron su obra.
Según su propia reseña:
"Lärdom nace de la lucha por la identidad en una sociedad que no es más que una convencionalidad, fruto de las convicciones dadas en un determinado momento. Pero Lärdom también supone la lucha interior entre lo humano y lo animal, partiendo de la base de que somos animales antes que humanos, animales sociales.
Sin embargo, Lärdom no pretende conformarse como un discurso filosófico o antropológico, entre otros, sino que se configura en el marco de un espectáculo en el que el yo supone una mezcla de identidades, lejos de la autenticidad, un yo producto de las circunstancias de los individuos, un yo que no se corresponde, o sí, con una sociedad homogeneizadora y globalizadora de la identidad".
Sin embargo, Lärdom no pretende conformarse como un discurso filosófico o antropológico, entre otros, sino que se configura en el marco de un espectáculo en el que el yo supone una mezcla de identidades, lejos de la autenticidad, un yo producto de las circunstancias de los individuos, un yo que no se corresponde, o sí, con una sociedad homogeneizadora y globalizadora de la identidad".
Ahí es nada.
He hecho mis deberes y he averiguado que "ECOTONO", según mi gran amiga la Wikipedia, es "la zona de transición entre dos o más comunidades ecológicas (ecosistemas) distintas". Por su parte, "Lärdom" viene a significar aprendizaje, si no me equivoco.
Vale, ¿y ahora?
Estas definiciones encajan con la idea que me hice del espectáculo. Resulta que este experimento versa, si no me enteré mal, del CONFLICTO que existe entre la parte animal del ser humano y su parte "doméstica".
A través de la danza y la mímica, y acompañados por la música y luces de colores cálidos, los intérpretes aparecen divididos en dos CATEGORÍAS. Por un lado, dos neandertales y, por otro, una pareja de ejecutivos modernos y sofisticados.
En breves instantes, y con una coreografía precisa, se caracteriza la filosofía y la ACTITUD de ambos dúos. Curiosidad e inocencia frente a soledad y estrés.
Poco a poco, ambos mundos se entremezclan, a través de unas potentes danzas. Así, me parece entender que los neandertales quedan seducidos por lo superficial de nuestro mundo actual, al tiempo que la intérprete femenina se deja encandilar por la simplicidad y la fuerza de la otra pareja. Luego viene una lucha por ser el "macho dominante" entre la pareja de la bailarina y los semi-hombres. Al FINAL... bueno, no voy a desvelar el final.
He de reconocer que la pieza es compleja. El sentimiento principal es fácil de comprender, y la idea general también. Seguro que se me escaparon algunos matices, ya que se trata de un espectáculo que permite muy diversas lecturas, pero eso no me impidió disfrutar de lo lindo.
No sé quién dirigió la obra, pero creo que lo hizo con habilidad. Los INTÉRPRETES estuvieron francamente bien. Realizaron una exhibición de dominio del cuerpo y de sentido del ritmo que, a un patán consumado con yo, le resulta casi mágico. En ocasiones se notó alguna falta de sincronía, eso es cierto, y la parte de la danza, en general, lució más que la actoral (que no estuvo nada mal tampoco). En mi opinión, como profano en la materia, esperaba que el baile de los neandertales fuera más visceral, diferente en estilo y "pegada" al de los ejecutivos. Por lo demás, "chapeau".
Un inconveniente del que adolecen muchos espectáculos de calle, no siendo este una excepción, es la falta de VISIBILIDAD. Muchos movimientos se realizaban a nivel de suelo y, dado el gran número de personas y las características del sitio, resultaba muy complicado no perderse varias escenas. A esto contribuyó la magnífica y enorme farola que estaba situada justo en mitad de la plaza (del DEAN, para los puntillosos).
El ATREZZO, sencillo y pragmático, dio juego. Se usaron unas sillas, una mesa y un par de biombos de manera interesante, generando imágenes visualmente atractivas y potentes.
En RESUMEN: una atrevida propuesta que me hizo disfrutar a pesar de lo crípticos que me resultaron algunos pasajes, un despliegue físico ante el que me quitaría el sombrero, si llevara, y un ejercicio de crítica y reflexión interesante.
Siempre es difícil opinar cuando un amigo está en el "ajo", pero esta vez no ha sido tan complicado. Me gustó. Prometedor arranque de este proyecto. ECOTONO, no lo olvidéis.
